A través del mismo se busca fortalecer las respuestas integrales desde un enfoque interseccional, generando un espacio de intercambio sobre experiencias y prácticas impulsadas en la región. Se busca que los gobiernos, organizaciones sociales y movimiento de mujeres puedan, en este espacio, inspirar e inspirarse para acelerar los procesos de prevención y respuesta a la violencia basada en género.

Distintos materiales comparten modelos, herramientas y prácticas de prevención y respuesta a las violencias, los cuales se orientan a reconocer las experiencias diferenciadas de poblaciones que se ven impactadas por múltiples discriminaciones y exclusiones que limitan o niegan el ejercicio de derechos fundamentales. Así, podrán encontrarse materiales centrados en la situación de mujeres indígenas, afrodescendientes y con discapacidad, entre otras. El reconocimiento y la visibilización de estas situaciones con diferentes tipos de discriminación y desventaja es fundamental para la generación de acciones estratégicas y políticas orientadas a reducir las brechas, eliminar desigualdades, generar oportunidades, reparar y garantizar derechos fundamentales. 

Una respuesta oportuna y de calidad requiere poner en centro a las mujeres sobrevivientes de violencia. El Paquete de Servicios Esenciales, sobre cuyos principios y recomendaciones están desarrollados los materiales aquí compartidos, introduce componentes que son esenciales en una respuesta multisectorial ante mujeres y niñas que son objeto de violencia. 

La prestación, coordinación y gobernanza de los servicios esenciales en los sectores de atención sanitaria, servicios sociales y los sectores policial y judicial pueden mitigar de manera significativa las consecuencias que tiene la violencia sobre el bienestar, la salud y la seguridad de las mujeres y las niñas, ayudando en el proceso de recuperación y empoderamiento de las mujeres para evitar que la violencia se repita. 

Los servicios esenciales pueden reducir las pérdidas que experimentan las mujeres, las familias y las comunidades en términos de productividad, resultados académicos, políticas y presupuestos públicos, así como contribuir a romper el ciclo recurrente de violencia.